jueves, 31 de enero de 2013

Buscando - Albert Pla

Hoy iba a escribir algo, pero me ha parecido tan mierda comparado con la canción que voy a compartir con vosotros ahora, que he tenido que borrarlo y enterrarlo. Ya me pillará inspirado otro día. Por lo pronto, prestad atención a cada frase y disfrutad.

Te anduve buscando
por todos los lugares
te anduve buscando
desde siempre que yo,
sin saberlo, te anduve buscando.

Yo te anduve buscando,
sin saber que eras tú
lo que andaba buscando,
yo vivía sin rumbo
y el tiempo pasando, pasando...

Perdona, amor mío,
soy un retrasado
por haber perdido tanto tiempo
en llegar a tu lado.

Yo te anduve buscando,
hasta el fin de los mundos
te anduve buscando,
y me entretuve entre cielos
y abismos lejanos y extraños.

Y te seguí buscando,
tonteando y probando
sueños infundados,
ya notaba algo raro,
que nada tenía sentido.

Perdón, amor mío,
fui patoso contigo,
por haber sido tonto
y tan torpe y no haberlo sabido...

Que todo estaba escrito,
que estar juntos al fin
era nuestro destino
y que tarde o temprano
al final íbamos a encontrarnos.

Yo te anduve buscando,
llegué tarde...y así...
un poquitin despeinao,
y es que me perdí mucho
y al final encontré tu camino...

Perdona, amor mío,
olvidemos que un día
no nos conocimos
ahora todo es distinto
y me siento importante contigo.

Yo te anduve buscando,
y ahora me alegra tanto
saber que eso es cierto,
que yo estuve viviendo
tan sólo para este momento

Yo te anduve buscando,
sólo para decirte ahora mismo
te quiero, quiero hacerlo contigo
y para que sepas lo que yo siento.

Y si te dije, te quiero,
ahora te lo repito:
te quiero,te quiero,
te quiero,te quiero,
te quiero,te quiero,
Y si te dije, te quiero,
ahora te lo repito:
te quiero,te quiero,
te quiero,te quiero,
te quiero,te quiero...


miércoles, 30 de enero de 2013

(Te escribo un relato) La historia de uno de tantos

El lector Jose hace la siguiente propuesta:
Hola, me gustaría participar en tu blog.
Las palabras son: árbol, espacio, meditación, vacío y experiencia.
Y la época los años 30 o 40.
Un saludo.
Pues bien Jose, espero que te guste lo que he escrito. Un saludo a ti también y gracias por participar!!

Sentado bajo el árbol de enfrente de casa miraba al atardecer. "¡Qué bonito!" Se decía a sí mismo. "Espero que en Francia podamos ver estos paisajes". El tiempo para su meditación estaba a punto de terminar. Tenia que estar a punto de terminar, pues debía tomar una decisión: emigración o lucha armada. La guerra era inminente en España y no quería hacer pasar a su familia por aquella horrorosa experiencia, así que se había puesto en contacto con algunos familiares que tenía en Francia para que les dieran cobijo durante el espacio de tiempo necesario. Unas semanas, unos años o quizás, toda la vida.
Tenía frente sí mismo dejar un vacío en su alma: o bien dejar de lado a su familia, mandarla a Francia y luchar con sus compañeros o bien marcharse con su mujer y sus hijos y abandonar todo cuanto él creía, sus ideales, su forma de pensar, su tierra, el lugar donde nació y creció.
Pensaba que lo tenía claro. Ya tenía hecha las maletas y estaba a punto de marcharse cuando un compañero de la fábrica, fusil en mano, le dijo: "Camarada, te necesitamos para salvar esta tierra". No pudo soportarlo, pero tenía que morir luchando por aquello en lo que creía, y con lágrimas en los ojos se despidió de su familia, sabiendo a ciencia cierta que nunca más volvería a verla.

martes, 29 de enero de 2013

Sueños diáfanos

Tengo un sueño. Un sueño que se va de madres. Un sueño que va de placentero a pesadilla.
El sueño es surrealista y me traslada a tiempos pasados en el que lo raro era normal y lo normal era lo raro. Las formas asimétricas y colores chillones son los que dominan un ambiente en el que suena una música rara, que no he escuchado en mi vida. "¡Es la música del nuevo milenio!" gritan los habitantes de este extraño sueño. Tendré que creerles. De repente volvemos a tiempo presente, donde todo se ve más real, pero es más oscuro. Los colores que antes abundaban y me volvían locos los ojos ya no están. Palpo las paredes con incredulidad, todavía no me fío de este lugar y no sé hasta qué punto todo esto es real. Cauteloso, voy midiendo todos mis pasos, este lugar es tan real, que me cuesta hacerme a la idea que es un sueño. "Es un sueño, es un sueño, es un sueño", me repito a mí mismo, siendo consciente de que lo es, pero es que es tan real que ni siquiera me atrevo a pellizcarme. Impaciente, dejo pasar el sueño, esperando algo, fijándome en cada detalle, a la espera de cualquier cosa rara que confirme las sospechas de que estoy en un sueño, y no en una pesadilla consciente.
En un abrir y cerrar los ojos, ya no me encuentro en el sueño. Ahora estoy en la nada, en el vacío, supongo que será lo que me deparará el futuro. No es real, tampoco es imaginario. Es nada, es vacío. Todo está por escribir. Ahora lo entiendo todo. Podemos recordar el pasado y modificarlo a nuestro antojo para odiarlo o idealizarlo. No podemos modificar el presente, pues es fruto de nuestras acciones pasadas, sin embargo, el futuro es blanco, vacío. El futuro es nuestra posesión más valiosa y podemos moldearlo a nuestro antojo para que cuando se convierta en presente, solo nos quede disfrutarlo como el más real de los sueños.


viernes, 25 de enero de 2013

No me aburras

Haz lo que quieras, pero diviérteme. Tienes completa libertad de movimientos. Puedes hacer lo que se te antoje, pero trata de hacer que me entretenga. Y no te lo pido por favor. Es una orden.
Pégame, seré capaz de soportar todos los golpes que puedas darme. Dame en la cara, en la barriga, en los cojones. Donde quieras. Pero no me aburras.
Escúpeme, trátame como a una mierda. Ríete de mí. Insúltame hasta el desgaste de tus cuerdas vocales. Grítame delante de todos, en privado, por chat, por cam. Pero no me aburras.
Ponme la zancadilla, tírame piedras, lánzame cuchillos y balas para que los intente esquivar. Méate en mí si eso te hace feliz, plántame un zurullo encima. Pero por favor, no me aburras.
Dame fracasos, decepciones, chascos. Puedo aguantar todo lo que me puedas tirar. Pero, por favor, te lo repito una vez más: no me aburras.
Desmonta mis ideales, y cuando los tengas desmontados lánzalos a tomar por culo y déjame como una mierda. Intenta que quede como un gilipollas. Te lo pido por favor. Ah, y por supuesto, haz todo eso, pero no me aburras.
No me aburras porque si lo haces, te odiaré por siempre.


jueves, 24 de enero de 2013

Pero qué he hecho yo?

El universo tiene muchas formas de decirte las cosas. Algunas son evidentes, otras son curiosas y otras rozan el absurdo.
Cuando uno no está en racha, lo nota uno mismo, es consciente que algo no va como tiene que ir. Lo que normalmente es una carretera lisa, de pronto se convierte en un camino empedrado. Hasta ahí bien. Todo correcto. Pero el universo es un cachondo, y de lo cachondo que es, hay veces que se pasa de cabrón.
Me refiero, siguiendo con el símil de las carreteras, a que cuando la carretera es lisa, apenas hay baches, todo es prácticamente liso y el universo como que se desentiende de ti. Piensa: "este tío está bien, ¿para qué molestarle?". Lo cínico del asunto viene cuando cogemos una salida a una carretera de problemas... ahí es cuando vienen los baches, pero no vienen de uno en uno, ¡faltaría más! El universo, en su afán de ser un cabrón retorcido va mandando baches a la carretera en forma de pequeñas mierdas rutinarias que te hacen pensar: "¿pero qué cojones es esto?".
Sí amig@s, situaciones como: pararse en todos los semáforos, pillar el típico camión que va a 20km/h y no se puede adelantar, estar más torpe de lo normal y tirar cosas al suelo... cosas que seguro que os suenan a todos y que nunca pasan, o pasan ocasionalmente. Hasta que entras en la carretera con baches, que viene todo eso de golpe.
Pues eso, quería mandarle una pregunta al universo: "tío, ¿qué te he hecho yo? ¿Por qué quieres joderme?". Y dicho esto, puedo volver a mi día de mierda.
No sé porqué, pero desde que dije que los jueves molan, el universo actúa como si estuviera en la oposición y quisiera demostrarme lo contrario... a lo mejor si digo que son una mierda, empezarán a irme mejor. Sin embargo eso sería traicionarme a mí mismo, y no pienso dar mi brazo a torcer. ¡Los jueves molan! (Aunque no este en particular, ni el pasado...).

miércoles, 23 de enero de 2013

(Te escribo un relato) El viaje a Milán

¡Estrenamos la sección "Te escribo un relato"! La lectora Sandra nos envía este aporte para que le escribamos un relato.
Las palabras son: moda, ira, recuerdos, flores y dibujar
Y la ciudad: Milán
Ale, a escribir!! :) 
Bueno Sandra, espero que te guste lo que he escrito. Sigue visitando la web y participando cada vez que quieras!!


La ciudad de la moda no lo era para ella. Se sentía triste y frustrada, pues tenía que hacer aquel viaje ella sola. Al principio pensó en cancelarlo, pero era demasiado bonito para dejarlo correr, y había dedicado mucho tiempo a planearlo, así que decidió marcharse sola a Milán. A verlas venir.
Recorriendo sus calles, le venían recuerdos a su mente, como si ya hubiese estado allí, y recordaba los ratos que había pasado junto a él planeando el viaje y haciendo visitas virtuales por la ciudad. Su cara no dibujaba una sonrisa... todavía, es más, estaba llena de ira cada vez que pasaba por un lugar y se decía a sí misma: "este zona es la que yo quería ver con él". Ira que se transformaba en rabia, y después en sollozo.
Sin venir a cuento alguno, una pequeña niña que pasaba por allí, vio a la chica llorando, frente a la iglesia de Santa María. Llevaba junto a ella un ramo de flores que seguramente le habría regalado su madre. Se paró junto a la chica y le dijo con un acento italiano, pero que la chica entendió perfectamente: "toma estas flores, a ti te hacen más falta que a mí".
La chica enmudeció ante el gesto de la niña y las aceptó con buen agrado. Como si fuera un ángel, la niña se fue saltando al lado de sus padres, a los que cogió de la mano y se perdieron de la vista de la chica, que todavía no salía de su asombro.
Ya no le importaba Milán, ni le importaba él, ni todo lo que había ocurrido entre ellos. Solo le importaban sus flores, y aquel gesto altruista de la niña que supo ver en ella la grandeza que desprendía y que nada ni nadie merecía sus lágrimas.
"Nunca más", se dijo a sí misma. Nunca más.


martes, 22 de enero de 2013

Embustera

Como es imposible quedarme con solo una frase de esta canción, la tendré que poner entera

Siempre voy a tenerte que agradecer
que hayas sido conmigo tan embustera
y me hayas enseñado lo que es querer
bailar mientras rodamos por la escalera

Has despejado mis dudas
y has logrado que aprendiese
a ser un perfecto Judas
desde la jota a la ese.

Contigo he comprendido que la humedad
es algo que se seca y se olvida
gracias a ti he sabido que la verdad
es solo un cabo suelto de la mentira

Por eso sé que perderte
no era quedarse sin nada,
la muerte es sólo la suerte
con una letra cambiada.

Embustera.
tu corazón es una cremallera
de Christian Dior
blanqueas emociones,
traficas con botones,
pierdes con mi perdición

Dormir contigo es repetir francés en una facultad
donde un Miró parece una esquela
y enseñan cuánto mide la oscuridad:
sumando pesadillas y duermevelas

Hoy llamo a las rosas pan
y al vinagre desatino
las mujeres que se van
se quedan en el camino.

Por mucho que me duela, debo admitir
que otras me ven sin ropa y tú desnudo
será mucho mejor, si pretendo huir
cortar la cuerda, deshacer el nudo.

Ya no juego en tu tablero,
he roto nuestra baraja
sólo diré que te quiero
si es a punta de navaja.

Embustera.
tu corazón es una cremallera de Christian Dior
blanqueas emociones,
traficas con botones.
pierdes con mi perdición.

Embustera,tu corazón
es una cremallera de pantalón,
tangueas decepciones,
traficas con botones,
pierdes con mi perdición


lunes, 21 de enero de 2013

Hoy no me quería levantar

Un aplauso por esos días en los que no te quieres levantar de la cama. Un aplauso por ellos. Malditos días de mierda. Qué ideal sería decirlo y hacerlo. Pero no se puede. Hay que levantarse, y hay que ir a trabajar, estudiar, o lo que sea que haga cada uno. Pero qué bonito sería.
Qué ideal sería poder desconectar durante un tiempo, hasta que todo volviera a la normalidad. Qué ideal sería, pero qué aburrido. La balanza de la vida vuelve a hacer efecto. ¿Diversión a qué precio? Al precio de la estabilidad emocional. Parece demasiado, ¿realmente vale la pena?
Si me aburro porque me aburro, si me divierto porque me divierto. ¿Qué cojones me pasa? ¿Qué cojones nos pasa? Malditos seres inferiores que nunca están conformes con lo que tienen...
Como bien decía Alaska: ¿Dónde está nuestro error sin solución? Qué confusiones. ¿Qué quiero realmente? ¿Es alcanzable? La respuesta sin duda es que: ¡no! ¡No, joder, no! ¿Y por qué la busco? Está completamente fuera de mí. Inalcanzable. Tan cerca y a la vez tan lejos. Qué impresión más extraña. Siento que puedo tocarla con los dedos, pero en realidad, está a kilómetros de mí. Perra vida.
No quiero quejarme, quejarse es de cobardes. Pero ahora soy un cobarde, y necesito quejarme. Necesito gritar sin que nadie me oiga. Pero es tan difícil... pues el sonido del grito traspasa fronteras y alguien acabaría oyéndolo y lo que es peor: enfadarse por el grito. No se dan cuenta que este grito no tiene nada que ver con nadie. Es solo mío. Entonces, ¿por qué se tiene que enfadar nadie? ¿Por qué me importa que alguien se enfade?
Quizá el tiempo me ayude a decidir dónde y cuándo gritar. Intentaré no salpicar mucho cuando esto ocurra...


jueves, 17 de enero de 2013

Jueves tío, molas

Hoy es jueves. Mola. Molan los jueves, son la antesala del fin de semana. Es como cuando vas al concierto de tu grupo favorito y aparece un telonero, amenizan el ambiente y sabes que justo después de ellos, vas a disfrutar como nunca.
Los jueves están llenos de sorpresas, como los teloneros. Hay veces que son eso, simples teloneros, pasan sin hacer ruido, cumplen su función de prepararte para el gran concierto y fuera. Pero hay otras veces que te llevas la gran sorpresa y dices: "oye, que no está tan mal", ahí es cuando descubres que no es un día cualquiera y afrontas el resto de la semana con más ánimo.
También hay veces que te encuentras al típico groupie que, deseoso de que empiece el concierto de su banda favorita, intenta boicotear al pobre telonero, que no ha tenido opción de elegir cuándo salir. Simplemente quiere una oportunidad de ser querido como la banda a la que telonea.
Pues bien, este ha sido el día de hoy para el que ahora escribe. Al lado de , tengo al típico groupie del fin de semana que odia los jueves, y parece ser que quiere boicotearme el día. Pero este cabrón no sabe que yo soy más duro de mollera que él, y que si anoche me acosté feliz, es muy probable que pase todo el día en este estado. Ya puede pisarme, tirar piedras al escenario, que a lo mejor lo único productivo que se lleva, va a ser una buena hostia, pero con amor :)
No pienso consentir que nada ni nadie arruine mi estado de felicidad cuando lo consigo, y mucho menos, un groupie de mierda. Hoy, por lo menos hoy, voy a ser feliz. Y no me importa lo que me ocurra. Esta noche dormiré en un estado de felicidad permanente. Mañana ya será otro día.


martes, 15 de enero de 2013

Hacer o no hacer, esa es la cuestión

¿Qué hacer? Un nuevo sueño acecha, y la ilusión está renovada por completo. Es la primera vez que contemplo una vida entera con este sueño y me hace ilusión. ¿Qué hacer?
Es difícil encontrar motivación en los tiempos que corren. El problema es que cuando se encuentra, es tan utópica como inaccesible, así que nosotros, como seres humanos de mierda que somos, preferimos agarrarnos a algo seguro, aunque ello implique una vida condenada a la desmotivación. Y más en los tiempos que corren...
Por una vez, me gustaría ser capaz de sacarme los huevos, ponerlos encima de la mesa y decir: "¡Aquí estoy yo! ¡Voy a luchar por lo que creo y quiero!", pero no es tan fácil, mis huevos hace ya un tiempo que están gastados para hacer estas cosas.
Tampoco quiero pedir consejo, pues como bien reza el refranero español: "Consejos vendo, que para mí no tengo". Cuando damos un consejo de este tipo, decimos lo que nos gustaría hacer, pero no lo que haríamos en realidad. Valiente hipócrita es el ser humano.
Tengo dos opciones: optar por la vía rápida y hacerlo mientras dure la euforia (y que sea lo que quien quiera que lleve los mandos quiera), o dejar que pase el tiempo y que se apague la llama. Otra vez. Otra llama apagada. Dentro de poco no va a quedar luz en mi vida, y en ese momento pensaré: "¿qué cojones hice mal?" Y me acordaré de estas palabras que hoy comparto con todo el mundo. Y seguramente lloraré, mientras mi vida desmotivada seguirá su curso, como otras tantas vidas desmotivadas siguen el transcurso de los días...


lunes, 14 de enero de 2013

A tomar por culo, porno porque sí

Cuando estoy cerca de ti, me salen sarpullidos de no poder tocarte, y en la soledad de mi persona, me comporto como un animal buscando tu deseo.
Quiero beber del jugo de tus sudores y sentir como resbalas por mi cuerpo mientras juego con tu figura. Quiero alimentarme de tus gemidos y no quiero tomar otra comida más durante toda mi vida.
Quiero que los dos formemos un solo cuerpo, una sola presencia. Quiero fundirme contigo y por siempre despegar. Quiero alcanzar el cielo pegado a ti.
Quiero que juntos gritemos de placer, tan alto que rompamos la barrera del sonido. Quiero reventar ventanas y quiero dejar sordo a cualquiera que esté a diez kilómetros a la redonda.
Quiero despeinarme contigo, que me claves las uñas a la espalda y que la sangre resultante caiga por mi espina dorsal como si fuera una bestia. Quiero gritar de dolor mientras te estremeces del placer.
Esta noche no te quiero recatada, quiero que seas una loba, una tigresa. Quiero que te avalances sobre mí en cualquier lugar del mundo, no importa quién o qué nos mire. La noche es nuestra selva, y nosotros somos los depredadores hambrientos.
Quiero todo esto, porque sé que tú también lo quieres. Noto cuando se cruzan nuestras miradas, y en ellas hay tanta tensión que podríamos alimentar a una ciudad entera de carga eléctrica.
Y si los dos lo queremos, ¿por qué no? Eso es lo que me pregunto todas las noches cuando no me dejas dormir. ¿Por qué no?


jueves, 10 de enero de 2013

Análisis nihilista acerca de la importancia de la gramática en el mundo urbano

¿Dónde andan las palabras sumidas en el miedo de la desconfianza? Cruzan el olimpo del cielo de los impuros mientras los condenados viven eternamente en un murmullo sordo, ahogados en el amargo sabor de la derrota. ¡Arrodillaos pecadores! ¡Habéis faltado a vuestra patria! ¡Solo soy un Dios gramatical que ha venido a combatir con fuerza y hastío a todos aquellos que consientan fallos en mi reino! Los demás dioses no hacen más que reírse a carcajadas de este pobre loco, soñador e impertérrito terrorista de juntar palabras.

Podría continuar con esta mierda, pero ¿para qué? No es el estilo de un servidor ser tan empalagoso, aunque a veces pueda resultar lo contrario. Sinceramente, no sé ni yo lo que he escrito en el párrafo anterior. Pero podría quedar de puta madre decir que he hecho un análisis nihilista acerca de la importancia de la gramática en el mundo urbano.
Escribir no debería ser tan complicado. ¿Acaso es problema del lenguaje? Creo que todos y cada uno de nosotros sentimos cosas. Las mismas cosas. Solo que hay unas personas (escritores) que son capaces de expresar con el lenguaje lo que sienten y otras que simplemente sienten, pero no pueden explicarlo. ¿Dónde está el problema ahí? Es probable que hayan sentimientos muy fuertes guardados en corazones de personas que no sepan expresarlos. ¿Cómo podemos extraerlos? Se antoja una tarea imposible en los tiempos que corren.
Siempre me ha fascinado la idea de poder sentir lo ajeno cuando veo a gente feliz, a gente triste, a gente que disfruta haciendo lo que hace. Me gustaría por un segundo, saber lo que está sintiendo esa persona. Creo que sería uno de los tres deseos que le pediría al genio de la lámpara.
Mientras tanto, tenemos que conformarnos con leer lo que sienten las personas que saber describirlo, o al menos lo intentan...


martes, 8 de enero de 2013

Los misterios del corazón

El muchacho no tenía ganas de abrir su corazón. Y por mucho que se lo decían, no quería abrirlo.
Sabía que le ayudarían, pero pasaba hasta el culo. "Esta vez no", se decía a sí mismo.
Al tiempo empezó a verlo todo nublado, no podía pensar con claridad, y las cosas que antes se le daban bien, ahora no podía ni siquiera pensar en realizarlas.
"¿Qué me pasa?" Se repetía una y otra vez. "Esto lo he hecho muchas veces, y siempre bien, ¿por qué ahora no puedo?". La melodía era siempre la misma y el resultado cada vez peor. Hasta que se dio cuenta de una cosa: el corazón no es solo fuente de amores, también es fuente de la inspiración, de la pasión, de las ganas de vivir y del aprendizaje.
El corazón es un órgano muy radical, no atiende a términos medios. Si cierras el corazón al amor, lo cierras por completo al resto de atributos que cuelgan de él. "Pero, " - se decía - " yo no quiero abrir mi corazón, ¿significa eso que nunca voy a encontrar la inspiración?". Su corazón sin inmutarse le respondió: "Cuando estés dispuesto a abrirme al mundo y dejar que saque lo que llevo dentro, entonces hablaremos".
Durante un tiempo, el muchacho hizo caso omiso a las recomendaciones de su corazón, y vagó por el mundo torpemente con más pena que gloria, siendo uno más, un robot más sin sentimientos, que no disfrutaba de los beneficios de abrir el corazón y ser completamente libre de alma y espíritu.
Arrepentido, un día le pidió a su corazón que se abriera, y éste, aunque radical, era tierno y bondadoso. Solo había un problema: que el corazón, como el resto de cosas de este mundo, es terrenal, y envejece y se oxida cuando no se usa. El pobre muchacho tuvo que soportar lo que le quedaba de vida aguantando con un corazón viejo, oxidado y desgastado por NO usarlo.


lunes, 7 de enero de 2013

¿Bienvenido? 2013

De todo lo que tenía que hacer en esta vida, solo me queda lo prohibido.
¿Qué me deparará el destino? Valiente saco de resentimientos que ahora afloran, ¿quién está jugando a las cartas con mi vida?
Sinceramente, me preocupa. No dejo de darle vueltas a la cabeza con estos pensamientos. Conozco la gravedad del asunto, y aun así me interesa. ¿Es prohibido? Sí ¿Lo quiero? Pues , ¿para qué nos vamos a engañar?
¿Quién decide lo prohibido? ¿Nosotros o la sociedad? Debemos tener muy clara esta pregunta, pues aunque parezca obvia, os puedo asegurar con total certeza de que no lo es tanto. Si el que lleva los mandos de lo que es prohibido es la sociedad, es prohibido para todos, pero si somos nosotros los que controlamos las restricciones... ahí es cuando nos podemos saltar las normas a la ligera, y esto puede ser muy peligroso, pues podemos perder el control de nosotros mismos.
Quizás esté siendo demasiado drástico, pero es como si estuviera en un precipicio y nadie me impidiera saltar, solo yo mismo.

Menudo mini-post de bienvenida al 2013 que acabo de escribir. Aun están mis ideas demasiado confusas como para tener sentido por sí solas, así que ahora tocan posts de este estilo, por lo menos hasta que me aclare.
¡Bienvenidos al 2013!