lunes, 14 de enero de 2013

A tomar por culo, porno porque sí

Cuando estoy cerca de ti, me salen sarpullidos de no poder tocarte, y en la soledad de mi persona, me comporto como un animal buscando tu deseo.
Quiero beber del jugo de tus sudores y sentir como resbalas por mi cuerpo mientras juego con tu figura. Quiero alimentarme de tus gemidos y no quiero tomar otra comida más durante toda mi vida.
Quiero que los dos formemos un solo cuerpo, una sola presencia. Quiero fundirme contigo y por siempre despegar. Quiero alcanzar el cielo pegado a ti.
Quiero que juntos gritemos de placer, tan alto que rompamos la barrera del sonido. Quiero reventar ventanas y quiero dejar sordo a cualquiera que esté a diez kilómetros a la redonda.
Quiero despeinarme contigo, que me claves las uñas a la espalda y que la sangre resultante caiga por mi espina dorsal como si fuera una bestia. Quiero gritar de dolor mientras te estremeces del placer.
Esta noche no te quiero recatada, quiero que seas una loba, una tigresa. Quiero que te avalances sobre mí en cualquier lugar del mundo, no importa quién o qué nos mire. La noche es nuestra selva, y nosotros somos los depredadores hambrientos.
Quiero todo esto, porque sé que tú también lo quieres. Noto cuando se cruzan nuestras miradas, y en ellas hay tanta tensión que podríamos alimentar a una ciudad entera de carga eléctrica.
Y si los dos lo queremos, ¿por qué no? Eso es lo que me pregunto todas las noches cuando no me dejas dormir. ¿Por qué no?


No hay comentarios:

Publicar un comentario